¿El líder nace o se hace? Es una pregunta muy común en el mundo de las organizaciones. Sin embargo, más allá de esa pregunta tipo “quién fue primero, el huevo o la gallina”, hay una verdad irrefutable.
La realidad es que el 99% de todo el liderazgo no se da desde la cima, sino desde la zona intermedia de una organización. Y por lo general, una organización tiene sólo una persona como líder.
Partiendo de la premisa de que no es lo mismo un jefe que un líder, así como no lo es un equipo de trabajo y un grupo de trabajo.
La verdad es que una persona (sea quien sea y esté en la posición laboral que se encuentre) puede mejorar y desarrollar su influencia con las personas a su alrededor en una organización, y lo puede hacer desde cualquier lugar en la organización. Pero para hacer esto, esa persona primero tiene que estar seguro de que no esté ligado a ningún mito del liderazgo.
Rompiendo paradigmas sobre el liderazgo
Pero, ¿Qué significa realmente ser un líder? Repasemos a continuación algunos conceptos…
El Liderazgo
Según Kouzes y Posner, “La esencia del liderazgo consiste en sacar a relucir la mejor versión de cada persona.”
Ampliando la frase anterior, tenemos que: “El liderazgo es la capacidad de influir en las personas y motivarlas para alcanzar un objetivo y guiarlas en el camino hacia este basándose en sus valores.” (Shiver Banguer)
Componentes del Liderazgo
De las frases anteriores, identificamos los siguientes componentes:
- Influencia: Hacer que las personas cambien su forma de pensar o actuar.
- Motivación: Lograr que las personas quieran hacer algo dándole motivos.
- Guiar: Acompañar a las personas en el camino hacia un objetivo.
- Valores: Principios que permiten orientar el comportamiento.
Los líderes más eficaces
Por otra parte, una investigación realizada por la consultora Hay/Mcber, basado en una muestra aleatoria de 3,871 ejecutivos, seleccionados de una base de datos de más de 20,000 ejecutivos en todo el mundo reveló que de hecho, en lo que liderazgo respecta, no existe solo uno, sino seis estilos de liderazgo distintos. Cada uno de los cuales surge de componentes de la inteligencia emocional.
Tomados individualmente, los estilos tienen un impacto directo y único en el clima laboral de una organización, empresa, división o equipo y , a su vez, en el desempeño financiero.
Así pues, en la actualidad, los líderes con los mejores resultados no se apoyan en un solo estilo de liderazgo, sino que utilizan la mayoría de ellos en una situación determinada.
Los 6 estilos de liderazgo
Según Daniel Goleman, los ejecutivos más eficaces usan una colección de estilos de liderazgo distintivos. Cada uno en la medida justa y en el momento preciso.
Tal flexibilidad es difícil de poner en acción, pero rinde frutos en el desempeño organizacional.
Así tenemos que:
- Líderes Coercitivos: Exigen una conformidad inmediata.
- Líderes Orientativos: Movilizan a las personas detrás de una visión.
- Líderes Afiliativos: Crean lazos emocionales y armonía.
- Líderes Democráticos: Crean consenso mediante la participación.
- Líderes Ejemplares: Esperan excelencia y autonomía.
- Líderes Formativos: Desarrollan a las personas para el futuro.
Fuente: Harvard Business School Publishing Corporation
Impacto en el clima laboral y los resultados
El mejor estilo de liderazgo
Los líderes que han logrado dominar cuatro o más estilos -en especial el orientativo, el democrático, el afiliativo y el formativo- suelen tener el mejor clima laboral y desempeño de negocios.
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